Soacha era una ciudad olvidada, sumida en la pobreza y el abandono. Un lugar llamado el hueso pelado, a donde llegaban ríos de gente desplazada para luchar contra dificultades y carencias. Sin embargo, en 2019 sus habitantes sorprendieron a la maquinaria política al elegir a Juan Carlos Saldarriaga como alcalde. Amado por muchos y criticado por otros, hoy revisamos qué ha hecho este nuevo gobierno para pasar de ser el hueso pelado a poder invertir más de $1 billón en obras.
El reto de transformar a Soacha en una ciudad poderosa y pujante
Desde el inicio de su gobierno, el alcalde Saldarriaga sabía que era urgente un cambio profundo en Soacha. En pocos años, la ciudad pasó de ser un pueblo de 40 mil habitantes a tener más de 1 millón. Esto la convirtió en la sexta ciudad más grande de Colombia, pero sin ningún orden ni beneficio.
La movilidad era caótica, con calles sin pavimentar, colonias sin agua ni drenaje, y las grandes obras parecían solo un sueño debido a la falta de presupuesto. A todo esto, se sumaron los problemas de pobreza, salud, seguridad, educación y falta de empleos.
Por su parte, Saldarriaga quien invirtió en más de $1 billón en obras sabía muy bien lo que era vivir estos problemas en carne propia, pues tampoco la tuvo fácil. Sus orígenes fueron humildes, pues él mismo llegó al sector de Cazucá hace 40 años desplazado por la violencia. Por esa razón, a pesar de las adversidades soñaba con ser el alcalde de Soacha y poder hacer la diferencia.
Al final, Saldarriaga fue electo después de intentarlo cuatro veces sin éxito. Por eso insiste en que no hay que agachar la cabeza y defiende sus criterios para sacar adelante al municipio, aunque a veces lo tachen de arrogante.
Durante su campaña a la alcaldía en 2019, Juan Carlos Saldarriaga señaló que quienes habían gobernado por años en Soacha, tenían convencida a la gente que no había plata. Pero esto no era así, ya que, según él, “no existen municipios pobres sino mal administrados”.
Por eso estaba seguro de que parte de la plata se perdía y a la ciudad solo le daban chichiguas. Peor aún, todo el mundo se había comido el cuento de que Soacha era una ciudad pobre llena de pobres. Como consecuencia, Soacha nunca tenía dinero para invertir en grandes obras y dependía de la caridad del Gobierno Nacional y Departamental.
Saldarriaga ganó con la misión de transformar a Soacha. ¿Cómo va?
Ante estos desafíos, Saldarriaga decidió actuar de frente y así invirtió en más de $1 billón en obras, comenzando por resolver la falta de plata para hacerlas. Hoy, gracias a los impuestos de los soachunos se están iniciando numerosas obras que suman más de 1 billón de pesos en inversión.
Proyectos importantes como el nuevo hospital de tercer nivel, la universidad de Soacha y la creación de la Cámara de Comercio son una realidad gracias al apoyo del Gobierno nacional. Algo que no hubiese sido posible si Soacha no tuviese la plata para aportar la parte que le correspondía.
A pesar de estos logros, el tema del catastro multipropósito se ha convertido en la “pena y gloria” de Juan Carlos Saldarriaga. Recién terminada la pandemia, el alcalde tuvo que actualizar el valor de los predios de la ciudad, ya que muchos inmuebles no habían pagado impuestos durante años, y otros pagaban cifras mínimas.
Con esto se pudo actualizar el impuesto predial y logró que 30,000 inmuebles que nunca habían pagado impuestos comenzaran a hacerlo. Esto ayudó a mejorar las finanzas de la ciudad, aunque también generó molestias y denuncias en su contra.
Sin embargo, la implementación del catastro multipropósito ha sido reconocida incluso a nivel internacional. Soacha fue pionera en implementar este sistema en Colombia y es considerado un modelo exitoso para mejorar una ciudad.
Esto ha llevado al alcalde Saldarriaga a participar en foros internacionales, al considerarlo uno de los mayores avances de la ciudad. Por esta razón, el hoy alcalde de Soacha está convencido de haber tomado la decisión correcta y dice estar tranquilo ante cualquier investigación. De esta manera ha sido el impuso para invertir más de $1 billón en obras.
De las promesas al Soacha donde el cambio avanza. ¿Realidad o carreta?
Una vez superado el encierro a causa del COVID en 2020 y con un año menos de gobierno, el alcalde Saldarriaga arrancó el año 2021 enfocado en los proyectos importantes. Uno de ellos era el hospital de tercer nivel para Soacha, una obra esperada durante más de 20 años por miles de habitantes.
Finalmente, después de un largo proceso de gestión y trámites, la ciudad logró reunir el dinero necesario y consiguió la aprobación del proyecto. Una inversión total de 156 mil millones de pesos, de los cuales Soacha aportó el terreno y más de 57 mil millones, que salieron del pago de impuestos de los soachunos.
Además, forjó una alianza con el presidente Gustavo Petro, quien apoyó con el dinero faltante. Otro de los proyectos audaces es la construcción de vías alternas que incluyen 12 nuevos carriles para despejar la autopista Sur.
Esto para mejorar la movilidad entre Soacha y Bogotá, con un total de 18 carriles para facilitar la entrada a la capital. A esto se suman los 140 mil millones de pesos invertidos en la fase 2 y 3 de Transmilenio, que incluyen la construcción del portal El Vínculo, el más grande del sistema Transmilenio. Se calcula que esta obra beneficiará a 400 mil personas al día con este medio de transporte.
En cuanto a la violencia que ha plagado a Soacha durante años, el panorama parece estar cambiando. Este año, la ciudad se ha convertido en una de las grandes ciudades más seguras
de Colombia. ¿Esto es real? Datos de la Policía Nacional revelaron que en 2022 Soacha sufría alrededor de 18 asesinatos por cada 100 mil habitantes, pero para este 2023, esa cifra se redujo a solo 5. Un logro impresionante tomando en cuenta la cantidad de policías que tiene Soacha.
Mientras que otras grandes ciudades como Bogotá cuentan con 9 policías para cuidar cada grupo de mil personas, Soacha tiene un solo policía dedicado a proteger cada mil habitantes. Algo sorprendente para una ciudad de más de 1 millón de personas.
Sin embargo, en comparación con la capital, Bogotá registra 13 asesinatos por cada grupo de 100 mil personas. Ciudades como Cali reportan casi 50 homicidios y ciudades como Barranquilla, que son similares en número de habitantes a Soacha registran alrededor de 27 asesinatos. Incluso ciudades capitales con menos habitantes como Santa Marta sufren 36 asesinatos, y Neiva, que registra 21 casos.
La gestión del alcalde Saldarriaga al invertir en más de $1 billón en obras, no se limita solo a las obras y seguridad. Hoy en día, Soacha se destaca como la tercera ciudad del país en brindar alimentación a todos los niños de colegios oficiales a través del Programa de Alimentación Escolar (PAE). Además, 10.000 abuelitos de Soacha reciben un bono mensual de 180.000 pesos.. Así, el gobierno local lucha por aliviar los problemas de hambre y escasez alimentaria en las personas más vulnerables.
El camino por recorrer en en la ciudad
A pesar de los logros alcanzados, el alcalde Saldarriaga reconoce que hay metas pendientes, como más pavimentación de vías, la inversión en el campo y la creación de zonas industriales. El turismo también es un pilar importante en la visión de Saldarriaga. Soacha cuenta con un gran potencial para aprovechar su riqueza natural y cultural.
Proyectos innovadores, como la construcción de un puente de vidrio en el Salto del Tequendama, podrían convertir a la ciudad en un atractivo turístico de renombre internacional.
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Además, se busca impulsar el turismo en el páramo de Sumapaz, el parque de Canoas y otros atractivos naturales que generarán empleo y riqueza tanto para Soacha como para Bogotá y Cundinamarca. Así Saldarriaga en Soacha, invierte en más de $1 billón en obras.
El alcalde Saldarriaga, un hombre de origen humilde, entiende el valor de su gente y se niega a permitir que Soacha se mantenga en la adversidad. A pesar de las críticas y los obstáculos, ha trabajado incansablemente para transformar la ciudad.
Su gestión ha sido reconocida en el ámbito nacional e internacional, y ha sentado las bases de un futuro prometedor para Soacha. Ahora, es responsabilidad de todos los habitantes y ciudadanos comprometidos mantener el rumbo y luchar porque el cambio en Soacha siga avanzando.